El Cervantino...

El día de hoy contaré con pocos detalles mi viaje al Cervantino, ocurrido desde el pasado viernes 30 de Octubre hasta el Domingo 1o de Noviembre del presente año.

Después de terminar mis actividades escolares (como docente), me di a la tarea de preparar mi "maleta", que resultó ser una mochila con un cambio de ropa. Así pues estaba yo listo para emprender mi viaje hacia el Cervantino.

La salida era a las 3, el punto de reunión fue una gasolinera (con un Oxxo, obvio) y fue ahí donde llegó nuestro transporte: 2 camionetas totalmente equipadas para 14 pasajeros, proporcionadas por la empresa *publicidad* Trösten (la página todavía no queda lista, estamos en eso, pero técnicamente ya pueden contratar los servicios de transporte eecutivo y para eventos) *publicidad*; como no teníamos que preocuparnos de manejar, el chupe (el alcohol, no mi amigo) estuvo a la orden del día; cerveza y vodka para amenizar el viaje.

Realmente no tomé mucho porque mi cuerpo se pone nena, obligándome el ir al baño seguido; aún así hicimos un total de 4 paradas para deshacernos del líquido excedente en nuestros cuerpos.

Al llegar a la hermosa ciudad de Guanajuato, perderse antes de llegar al hotel fue un detalle excelente... imaginen a una bola de borrachos (aunque en ese momento yo no andaba mal) tratando de interpretar el GPS de un celular y preguntando como llegar a nuestro hotel; como llegamos de noche pues el centro de la ciudad era un despitorre total así que tuvimos que caminar. El hotel estaba ubicado en el centro, lo cual estuvo de huevos porque nos permitía tener el desmadre cerca.

Esa noche no hicimos mucho, desmadre por aquí, desmadré por allá... un concierto de música electrónica en la Alhóndiga de Granaditas y un bar rockero fueron suficientes para mí.

Al siguiente día, después del desayuno de las 11 am (pinches horas para levantarse ¿no?) decidimos vernos un poco "culturales" y comprar boletos para mínimo un evento oficial; en ese día le correspondía a "Hamlet" pero debimos haber imaginado que los boletos ya estaban agotados. Decidimos que nos embriagaríamos hasta que dieran las 8, porque esa era la hora en la cual se iba a presentar un espectáculo de danza folklórica.

Como era muy temprano (las 12), alguien tuvo la idea de visitar el museo de la Alhóndiga antes de caer en las garras del maldito alcohol... "Bien, el museo y ya"; Debo confesar que es un lugar interesante aunque las exposiciones temporales son lo más chingón, el resto tiende a ser un poco de recopilación sobre la historia de México hasta el Porfiriato. Un guía nos contó una versión interesante sobre la guerra de independencia, ese tipo de relatos que la SEP no publica y que francamente te hacen sonreír por pertenecer a un país con tantos hitos históricos (aunque luego la sonrisa se te borra porque sabes que muchas personas no han aprendido del pasado y nuestros gobernantes son unos estúpidos...).

Como el calor azotaba Guanajuato, la frase "vamos por chelas" no dio sorpresa así que nos dirijimos al bar "Mi pueblito", donde hay buena música y la chela está a $10. Eso fue a las 2, a las 3:40 de la tarde cuando yo llevaba 5 chelas encima me di cuenta que también ese día a las 4 la banda de unos cuates, "La senda del diablo", iba a tocar en Plaza del Baratillo; me despedí de mis cuates diciéndoles que me encontraría con ellos más tarde para lo del baile folklórico.

Admito que era plan con maña, una de las cosas que más me gusta hacer es separarme de un grupo por un rato y vagar alegremente sin preocupaciones; cuando llegué a la Plaza del Baratillo no encontré a ninguna banda tocando por más que los busqué, en su lugar estaban unos chavos del DF a punto de presentar una obra de teatro callejero... decidí quedarme a verlos. No eran malos pero tampoco excelentes, la obra duró 15 minutos y pues me entretuve durante ese rato.

Seguí caminando por las calles de la ciudad para ver que encontraba... un pseudo trovador, un break dancer, un payaso y un mimo callejero complementaron mi tarde. La verdad es que me gusta mucho ver un espectáculo en la calle, hubo momentos en que quería compartirlos con alguien pero lamentablemente las personas que estaban en el viaje no eran las adecuadas, por su perspectiva distinta acerca del Cervantino.

Después de un rato de ocio y soledad (premeditada), me reuní con mis amigos para ver el espectáculo de danza folklórica; la verdad es que a pesar de las frías hijasdeputa corrientes de aire, valió la pena quedarse. Esos güeyes la neta saben lo que hacen, fue una experiencia muy padre y casi mágica. Mucho talento y buena ejecución, simplemente de 10.

Al terminar la danza nos fuimos a "cambiar" para el antro (lo pongo entre comillas porque mi vestuario de tenis, playera y mezclilla no se modificó), supuestamente el más popular de Guanajuato. La verdad es que no es la gran cosa aunque sí valió la pena el ofrecimiento visual (sí, mujeres guapas); Aquí debo aclarar que soy un asco ligando en antro (o bueno, en general)... así que sólo me limité a ver, sumando el hecho de que yo traía una chaqueta mental desde la tarde, pensando en alguien.

Así es, aunque tenga la oportunidad de darme el atasque de mi vida con una desconocida... si tengo la imagen o recuerdo de alguna persona con la cual tengo "sentimientos encontrados" pues simplemente la oportunidad se va directo al caño. "Fidelidad" pendeja en mi opinión, porque no hay algo seguro, algo claro que justifique el chaqueteo mental... pero ahí va el pendejo de Daniel a preguntarse ¿qué pasaría sí...?, give me a fucking break ¬¬

Pero, me desvié del tema...

Terminó el antro y fuimos a dormir, amanecimos 20 minutos antes de entregar la habitación, recogimos en chinga, desayu-comimos enfrente del Teatro Juárez y abordamos las camionetas para el regreso.

Llegamos a Toluca a las 9 pm, cansados pero satisfechos por esta edición de viaje al Cervantino, esperamos con ansia el siguiente ¿alguien se apunta?

10 comentarios:

Unknown dijo...

me hubiera ido al antro con ustedes T-T en lugar de ir a un bar todo feo ¬¬ pero todo fue por no querer regresar solita al hotel en la madrugada un.n

La Alicia dijo...

Voy comentando según voy leyendo:

- Despitorre; jajajajaja

- Relatos que la SEP no pone en sus libros y tu paréntesis me hicieron reir jeje

- Vagar alegremente sin preocupaciones y sin más gente es la onda. Lo comparto.

- No a las chaquetas mentales amigo!!

- Yo no me apunto, xq el cervantino siempre es aventurero en mi vida...

Beso sensual!!

Xenomorph dijo...

@Ive - ¡yo no sabía que estabas! Supe de Abraham y Lilas... pero no imaginé al resto de la banda =P ¿para la otra no?

@La Alicia - No sé, las chaquetas mentales son lo mío... sobre todo si voy vagando.

Beso sensual a ti también!

Marthz dijo...

Opino que la parte más interesante fue la de las chaquetas mentales... pero ya te caché que no quisiste darle mucha importancia aunque sí la tenga :P

Anywaysss ¡ya quiero que me cuentes!

Te quiero harrrrrrrrto jajaja ¡¡¡besos!!!

Xenomorph dijo...

@Ñoña - pues sí, tenía que balconearme... ya te contaré.

Mitzi Dom dijo...

1. Qué chido que te la pasaste bieeeeen! :)

2. Qué envidia que viste a Modeselektor (el grupo electro de la alhóndiga) yo moría por verlos :)

Se te quiere, gran anécdota Danielin, si la vida no me pone algo raro para el próx. Cervan yo me apunto jojo

Ninja Peruano dijo...

Yo me apunto, pero sólo si hay enormes cantidades de alcohol de por medio.

Xenomorph dijo...

@Mitzilu - Si no me dices... ni me entero de esos güeyes.

@Ninja - Creo que es requisito para ir... al menos lo era con nosotros =P

Zorro de Terciopelo dijo...

Yo también me apunto!! Yo quiero ir, jaja, y de acuerdo con el requisito del Ninja.

En cuanto a las chaquetas mentales... creo.. creeeo que estoy igual que tú.

Cool Acid dijo...

Aww, que chido. Yo quería ir pero con el trabajo y la escuela pues ya no se pudo. Ni pex. A ver si para el próximo año.

kthxbye